El estilo de fotografía de familia que todavía no sabías que existía

Si quieres revivir tu maternidad dentro de unos años, esta es la página que no puedes dejar de leer.

Pero antes quiero avisarte

No voy a intentar que las arruguitas al reirte no salgan en la foto. Ni voy a buscar fotos perfectas.

Voy a estar con tu familia para conoceros a través de mi cámara tal cual sois. Sin escenarios ni poses.

Cada familia es un mundo y por eso cada reportaje es único.

Las imágenes que te enseño no son las que te voy a entregar a ti. Sirven para que entiendas mi forma de trabajar.

Dicho esto, te cuento.

Lo que te vas a encontrar

Tu reportaje va a ser totalmente diferente de los típicos reportajes de familia. Aquí no hay conjuntamos los outfits, cada uno se pone su ropa favorita. Ni esperamos al atardecer para tener la mejor luz.

Vas a verte cara a cara con tu día a día en las fotos. Las risas y también los lloros. Los juegos y los enfados.

Todo lo que vas a echar de menos y no quieres olvidar.

Te podría decir que tus fotos van a ser así. Pero no sería verdad.

Tus fotos van a ser tu casa, tu desayuno, tu paseo por el parque, vuestro día a día.

Lo que las madres piensan

Es estresante hacernos un reportaje de fotos porque mis peques no van a aguantar.

Mis reportajes son kids (y maridos) friendly.

No hay que sonreir ni mirar a la cámara, no hay que ponerse ropa que no quieres.

Quiero ver reir a tus peques, pero también quiero ver cuando se enfadan y lloran.

Cuando tu día es el mismo estemos mi cámara y yo o no, no hay estrés.

¿Por qué este tipo de fotografía?

Sé que haciendo fotografía lifestyle de familia tendría más clientes.

Pero desde que soy madre mi concepto de la foto perfecta ha cambiado.

Los cuatro en la playa jugando (o haciendo que jugamos), posando naturalmente sin posar ya no es lo que busco. No me revuelve.

Quiero fotos que me hagan un nudito en el estómago cuando las vea dentro de diez años porque somos nosotros de verdad.

Y quiero que tú también tengas esas fotos.

No lo dejes para mañana

Eres madre y no te voy a decir que el tiempo vuela.

Pero sólo tenemos 192 meses desde que nacen hasta que se pueden tomar una caña. ¿Cuántos han pasado ya?

Pues eso, que no es que quiera meterte prisa, pero tus hijos sólo van a ser así de pequeños ahora.

Y hasta que inventen la máquina del tiempo lo único que nos queda son las fotos.

hola@luciamolinafotografia.com